Los animales de la lluvia

"Los animales de la lluvia" es un libro de Pedro Villar con ilustraciones de Miguel Ángel Díaz editado por Diálogo infantil.

Me ha gustado mucho este libro porque es superoriginal, está escrito en verso y tiene mucho sentido de humor. Este libro está basado en el Diluvio Universal y el Arca de Noé, que fue un suceso relatado en el Antiguo Testamento de la Biblia. 

Os recomiendo que leáis este maravilloso libro.

Si quieres visitar el blog de Pedro Villar:

http://pedrovillar.blogspot.com.es/


Los animales de la lluvia

Hubo un diluvio universal y todos los animales querían salvarse. Eligieron a Noé para que los salvara, pero pensaron que el arca estaba muy mal hecha y no se fiaban.

Empezaron a llenar el arca, pero no cabían todos los animales. Noé pensó que era un desastre.

Hicieron un sorteo, que decía así: "Los que nadan, los que vuelan, los que van sobre la tierra. En el arca de Noé, todos caben sin USTED, te ha tocado 'bacalado' que estás comiendo pescado". Noé con sus familiares y unos miles de animales prepararon la maleta, de la forma más discreta, él ha sido el elegido, pocos saben cómo ha sido.  Hicieron otra vez el sorteo y la suerte la tuvo el loro porque hizo cara de bobo. Hicieron otro sorteo y le tocó al pez espada. Y Noé pensó que los peces debían quedarse fuera y también los que vuelan.

Los dragones y los seres mitológicos eran unos polizones, no sabían de ellos nada, porque en la lista no estaban. Localizaron al momento, los que vivían en los cuentos y los de la imaginación, y los colocaron en un montón.

Noé metiendo a un elefante en el arca.

Sin comerlo, ni beberlo llueve sobre el desierto. Ahora empieza la aventura. Durante cuarenta noches y cuarenta días sólo se escucha el agua que caía.

La tormenta terminó y gran monte se vio en el horizonte. Para saber si había terminado el diluvio, Noé mandó una paloma que creía que no iba a volver ni en broma. Pero cuando volvió en el pico trajo una ramita de olivo.

El arca iba a tocar tierra y Noé fue el primero en salir. Pero casi todos los animales salieron por la escotilla y le clavaron sus pezuñas, sus uñas,... al pasar por encima de él. Noé con pena miraba la puerta llena y dijo: "Nada queda en el recuerdo, si te he visto, no me acuerdo".

"Crecer y multiplicaros" gritó Noé a los animales. Menudo chasco porque nadie quedaba en el barco, y Noé se lamentó: "Esto no me vuelve a ocurrir, he pensado en dimitir. ¡Vaya desastre animal!"

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